“Para vivir en armonía es preciso escucharnos,
dialogar y proponer entre todos”.
Red para reconstruir el tejido social (Bolivia)
Por Rutilo Tomás Rea Becerra
y Pedro Gonzáles Castro
Como bien dice un refrán popular: No hay plazo que no llegue, ni deuda que no se pague. Y es así como, después de dos meses de intenso trabajo promocional de oferta política, llegamos al final de lo que se conoce como “campañas electorales”. Un fenómeno que, lejos de disfrutarse, para muchos solo exacerba los ánimos. Situación que esperemos disminuya al pasar los días (aunque suene a mucho pedir).
El nivel de estrés sostenido al que ha estado expuesta la población en estos días indudablemente crea el ambiente perfecto para actividades incendiarias, oportunidad que, desde luego, el conservadurismo no ha desaprovechado y utiliza todos los medios a su alcance (comentarios de los “televisos”, la radio y la prensa) para alimentar todo indicio de enojo y decepción de aquellos que tienen inhibido o cuyo funcionamiento prefrontal es intermitente.
Es indudable que después del dos de junio habrá decepción o alegría, y posiblemente de nuevo, enojo y más agresión. Durante varios días los “comentócratas y opinadores” se ocuparán del “análisis político”, tratarán de reconceptualizar, a conveniencia, constructos como democracia, justicia y, quizá vaticinarán la catástrofe de la economía de nuestro país. El proceso electoral será el tema de conversación en las pláticas de café, en la reunión de amigos y hasta en las comidas familiares.
Para aquellos que perdieron la apuesta, su refugio inmediato será una serie de exclamaciones y preguntas retóricas: ¡Oh no! ¡Más de lo mismo, otros seis años de desgracia! ¡Todos son iguales ¡¿Qué nos falló? ¿En qué nos equivocamos? ¿Por qué tenía que pasarnos esto?” ¿Por qué la gente no abre los ojos? y hasta un ¡Dios mío no puede ser!
Para “los ganadores”, quienes no están exentos a que les gane la soberbia, se espera un sexenio lleno de un vendaval de críticas de los perdedores quienes harán uso de toda la estructura orgánica del poder mediático, económico-financiero o político-cultural que esté en sus manos. Tanto ganadores como perdedores esgrimirán como San Mateo: El que no está conmigo, contra mí está; y el que conmigo no recoge, desparrama.
Uno de los errores más comunes en el ajedrez es jugar sin un plan. Cada pieza tiene un valor y eso no hay que perderlo de vista. En este sentido, el Partido-Movimiento de Regeneración Nacional está obligado a generar órganos de vigilancia más estrictos frente al “chapulineo” y el oportunismo de candidatos y dirigentes regionales, es mucho mejor desarrollar primero caballos y alfiles.
Desde luego que las próximas jugadas no serán una cosa sencilla. Hay que tener presente que algunos de estos artífices son producto de la negociación de acuerdos entre grupos, si no es que entre las cúpulas nacionales. Aunque algunos servidores que se incorporan son consecuentes con los principios y no se corrompen con facilidad, un número de ellos, nada desdeñable, han tenido un proceder muy cuestionable.
Por ello, se deben ir creando condiciones para el poder “plebeyo”, de los militantes de a pie, de “los de abajo”. Si esto no se logra, la decepción y la desesperanza en la Dirección, se irá incrementando. Aquí es donde la FORMACION POLITICA tendrá un papel preponderante y deberá llegar a toda la militancia, a todos los niveles y regiones, colonias y barrios y manzanas donde las condiciones lo permitan.
Reza un aforismo hipocrático que «La vida es corta y el arte largo. La experiencia fugaz de la crisis es peligrosa y la decisión, difícil». En este sentido, cada paso que se dé deberá ser muy calculado. Las becas y apoyos económicos a mujeres, jóvenes y adultos mayores es una labor social y humanitaria nada desdeñable, pero a la par debemos de brindar la capacitación y formación, no solo política, sino también enseñar a pescar a quienes aún tienen esa posibilidad y capacidad, formar cooperativas de producción, consumo y de préstamo, pequeños negocios familiares que junto con la Secretaría de economía logren fructificar y fortalecer lazos de coordinación entre vecinos, pueblos y regiones y fomente la recuperación del tejido social.
Es indudable que el Instituto Nacional de Formación Política ha impulsado cursos, talleres, conferencias y hasta intercambios de saberes importantes con países de América Latina, pero se debe redoblar el esfuerzo y, sin descuidar toda la plataforma virtual que se ha logrado, realizar estos cursos y talleres a nivel territorial, en zonas y regiones donde sea posible hacerlos de manera presencial. Se debe brindar todo el apoyo requerido a aquellos líderes que realmente están comprometidos con el esfuerzo de la 4ª transformación.
Hacemos especial mención a personajes como Laura Imelda Pérez Segura, una gran candidata para el ayuntamiento de Tlaquepaque; a la diputada local Claudia García, que en el municipio de Tonalá goza de enormes simpatías y a través de la cual se puede lograr grandes cosas respecto a la formación. A jóvenes militantes como Miztli Haro, Diego Mora y Adeline Navarro; los simpatizantes y militantes que participan en la Red de Círculos de Estudio de Jalisco. Tanto ellos, como aquellos que, desde el anonimato, son verdaderos obreros del cambio, verdaderos pilares del segundo piso para recuperar el tejido social, generar el cambio político-cultural y seguir impulsando la formación y la transformación.
Finalmente, no está por demás enfatizar que, sin compromiso personal y social, no se podrá transformar nada, por lo que las críticas –y sobre todo la autocrítica-, aunque necesarias, no son suficientes para generar un cambio y una transformación profunda de nuestra sociedad. ¡Caminando, andamos!
Excelente artículo Dr. Tomas muy adecuado para una sociedad convulsionada no sólo políticamente. La lucha sigue. Abrazo fraterno.